El Día Mundial del Retrete pone el foco en la importancia de una correcta protección de las aguas subterráneas
El 19 de noviembre se celebra el Día Mundial del
Retrete, que desde 2013 conmemora anualmente la importancia de los inodoros y
crea conciencia sobre los 3.600 millones de personas que viven en el mundo sin
acceso a un sistema de saneamiento gestionado de forma segura.
El eslogan del Día Mundial del Retrete 2022 es Hacer
visible el recurso invisible y se centra en los efectos de la crisis del
saneamiento sobre las aguas subterráneas. Tal y como señalan desde Naciones
Unidas, “poner en riesgo el agua subterránea es poner en riesgo la fuente de
agua dulce más abundante del mundo que apoya el suministro de agua potable”.
La campaña insta a los gobiernos a tomar medidas,
que reconozcan plenamente en sus planes la conexión entre el saneamiento y las
aguas subterráneas para salvaguardar este recurso hídrico vital.
El control de
la calidad de las aguas subterráneas
La Confederación Hidrográfica del Júcar, si bien no
tiene competencias en el saneamiento de las aguas ni tampoco en la gestión de
los servicios de evacuación y tratamiento de las aguas residuales, sí que juega
un papel muy importante relacionado con el estudio y análisis del estado
cualitativo y cuantitativo de las masas de aguas subterránea que existen en toda
la Demarcación del Júcar.
Hablamos de un total de 90 masas de agua que se
reparten en una extensión de más de 390 kilómetros cuadrados. Se trata de cerca
de un centenar de fuentes, manantiales y pozos o sondeos que ocultan al ojo
humano gran parte de su caudal; una ingente cantidad de agua que, en muchos
casos, resulta imprescindible para complementar el suministro de agua potable
de pueblos y ciudades.
Con el objetivo de asegurar un abastecimiento de
calidad y una óptima conservación de estas masas de agua (acuíferos), la
Confederación Hidrográfica del Júcar, O.A., realiza dos campañas anuales para
muestrear, analizar y evaluar la calidad y el estado de las aguas subterráneas.
La primera se realiza en primavera, coincidiendo con la época de aguas altas, y
la segunda comienza en otoño, antes de las grandes lluvias y después de dejar
atrás tiempos de mayor demanda hídrica, en especial la agrícola y de mínima
recarga de precipitaciones.
En total, se realizan más de 600 muestras a lo largo
del año en 314 puntos distribuidos por la Demarcación, y se evalúan cerca de
35.000 parámetros químicos (hidroquímicos, metales, contaminantes industriales
y una amplia batería de más de 60 plaguicidas) que permiten realizar una
radiografía de cómo se encuentra este recurso hídrico tan importante. Hace unas
semanas, coincidiendo con la época de aguas bajas, comenzaron los muestreos de
la segunda campaña anual, que completará los datos de 2022 referentes al estado
químico de las masas de aguas subterráneas, lo que permitirá verificar su
evolución en relación con años anteriores.
A este respecto, los últimos datos recopilados
reflejan que el 48% de las masas de agua subterránea no alcanzan un estado
óptimo. Del mismo modo, se constata que más del 26 % de las masas no cumplen
los parámetros de calidad admisible, en gran parte debido a que las
concentraciones encontradas superan los umbrales definidos en las normas.
Saneamiento
seguro en urbanizaciones y conjuntos de viviendas
Desde la Confederación se trabaja, además, en
labores de sensibilización acerca de la necesidad de un saneamiento seguro en
núcleos poblacionales y áreas residenciales, ya que existe un consenso técnico
generalizado sobre el hecho de que un saneamiento seguro resulta esencial en la
protección de los acuíferos.
En el ámbito territorial de la Demarcación
Hidrográfica del Júcar existen alrededor de 1.450 urbanizaciones y otras
agrupaciones de viviendas (aisladas o formando parte de áreas residenciales
alejadas del casco urbano) de las cuales, aproximadamente, sólo el 21 % dispone
de un expediente de autorización de vertido abierto en este Organismo.
El 80 % de las urbanizaciones restantes en su mayor
parte carece de red de alcantarillado e instalaciones colectivas de depuración
de las aguas residuales generadas, gestionándose éstas, en ocasiones, de manera
individual, en muchos casos con sistemas no adecuados o con un mantenimiento
ineficiente.
.-
Comentarios
Publicar un comentario