La Diputació actúa de emergencia para asegurar el talud del Cerro en Jalance tras un nuevo derrumbe

La sección de Riesgos Geológicos y Espacios Degradados de la Diputació de València ha iniciado una actuación de emergencia en Jalance para asegurar el talud del Cerro, después de que un derrumbe afectara a varios inmuebles situados justo bajo la ladera y se detectara la posibilidad de que pudieran producirse nuevos desprendimientos. 

La intervención, impulsada desde el área de Medio Ambiente, responde a la solicitud del Ayuntamiento, cuyos servicios técnicos alertaron de la presencia de bloques inestables y de un riesgo real para el vecindario. Ante este escenario, la institución provincial activó de inmediato los trabajos destinados a estabilizar el terreno y proteger las viviendas más próximas.

El diputado de Medio Ambiente, Avelino Mascarell, ha subrayado la importancia de actuar con rapidez “cuando se detecta un riesgo claro de caída de materiales”, y ha recordado que la Diputació dispone de una sección especializada precisamente para afrontar este tipo de problemáticas, muy comunes en municipios de interior con orografías complejas y que necesitan apoyo técnico y económico para resolverlas. La actuación en el Cerro contempla un saneo completo del talud, retirando los bloques con mayor probabilidad de desprendimiento para, a continuación, instalar 450 metros cuadrados de malla de alambre de triple torsión y otros 432 de red de cable de acero. Esta combinación permitirá estabilizar la ladera y contener posibles movimientos del terreno, con protecciones ancladas mediante bulones de hasta seis metros de profundidad que aseguran la resistencia del conjunto incluso ante episodios de fuertes lluvias o degradación del material rocoso.

Los trabajos, realizados mediante técnicas de alpinismo debido a la inclinación del talud y las características geotécnicas del entorno, están siendo ejecutados por personal especializado en entornos de difícil acceso. El objetivo es reforzar toda la superficie afectada y eliminar el riesgo de desprendimientos, ofreciendo tranquilidad a los vecinos cuyas viviendas se encuentran al pie del Cerro.