El incendio de Teresa de Cofrentes continúa sin control y mantiene el nivel 2 de emergencia

El fuego declarado en la tarde del miércoles avanza en un terreno de orografía complicada y con viento cambiante, obligando a mantener el máximo nivel de alerta y la movilización de amplios recursos terrestres y aéreos.

El incendio forestal que afecta al término municipal de Teresa de Cofrentes sigue activo desde que un rayo, en el marco de las tormentas secas del miércoles, originara las primeras llamas pasadas las tres y media de la tarde. Desde entonces, el operativo trabaja en un entorno de difícil acceso, con pendientes acusadas y vegetación densa, mientras el viento cambiante complica las labores de extinción. La cercanía de las llamas al entorno natural del macizo del Caroig incrementa la preocupación de los responsables de emergencias.

La Generalitat mantiene activada la situación 2 del Plan Especial frente a Incendios Forestales (PEIF), circunstancia que ha justificado la intervención de la Unidad Militar de Emergencias desde anoche. A primera hora de esta mañana operaban siete medios aéreos y se ha solicitado refuerzo a la comunidad de Aragón, mientras sobre el terreno actúan brigadas forestales, bomberos del Consorcio Provincial de Valencia, efectivos de la UME y personal de coordinación en el Puesto de Mando Avanzado.

Las autoridades ordenaron ayer el desalojo preventivo de unas quince personas en las pedanías de El Canalón y otra próxima a la Rambla Argongeña, así como de diseminados en el término municipal de Ayora. El Ayuntamiento de esta localidad instó a la población a mantener puertas y ventanas cerradas debido a la llegada de humo, que también se ha dejado sentir en otros puntos próximos como Almansa.

Durante la noche y la mañana de este jueves, el president de la Generalitat, Carlos Mazón, y responsables provinciales han seguido la evolución del incendio desde el lugar. El objetivo de la jornada es aprovechar las horas más favorables para frenar el avance de las llamas y consolidar líneas de defensa que permitan contener un fuego que, de momento, no está controlado.