Nacen 54 tortugas marinas de un nido no detectado en una playa de Almassora
El hallazgo de un nido no registrado de tortuga marina en la playa de Benafelí, en Almassora (Castellón), ha permitido rescatar con éxito a varios ejemplares recién nacidos de la especie Caretta caretta. El descubrimiento se produjo el pasado martes 1 de agosto gracias a la rápida intervención del servicio de socorrismo y la activación inmediata del protocolo de emergencia.
Un protocolo
eficaz y coordinado
La presencia
de crías fue detectada por los socorristas del arenal castellonense, quienes
observaron signos de actividad en la arena. Su actuación permitió movilizar en
cuestión de minutos a técnicos de la Universitat de València y de la Fundación
Oceanogràfic, quienes confirmaron la existencia del nido y supervisaron el
proceso de rescate.
En el
interior del nido se contabilizaron un total de 128 huevos. De ellos, 54 habían
eclosionado correctamente. Según los expertos desplazados al lugar, 43 crías ya
habían emprendido su camino hacia el mar por sus propios medios, mientras que
otras 11 fueron encontradas vivas dentro del nido. Estas últimas fueron
trasladadas al Oceanogràfic de València, donde permanecen bajo observación en
el ARCA del Mar, un espacio especializado para neonatos marinos, hasta que
estén en condiciones de ser liberadas.
Un fenómeno
cada vez más frecuente en la Comunitat Valenciana
Los 74 huevos
restantes no llegaron a desarrollarse, una cifra que entra dentro de los
parámetros normales en este tipo de eventos. Aun así, el hallazgo supone un
nuevo hito en el progresivo aumento de puestas de Caretta
caretta en el litoral valenciano, una tendencia que los biólogos
marinos relacionan directamente con el calentamiento del mar. Las altas
temperaturas estarían empujando a esta especie a modificar sus zonas de
reproducción, expandiendo su presencia a playas donde antes no era habitual
detectarlas.
Desde la
Fundación Oceanogràfic se subraya que este tipo de acontecimientos refuerzan la
necesidad de implicar a la ciudadanía en la vigilancia y protección del medio
marino. La entidad recuerda que, ante cualquier avistamiento de nidos o crías,
lo más importante es no intervenir directamente y contactar de inmediato con el
112. De este modo, se activa el protocolo adecuado, garantizando la
intervención de especialistas y la protección de los animales.
Conservación,
ciencia y futuro
El trabajo de
rescate, seguimiento y recuperación de especies vulnerables forma parte de la
misión fundamental de la Fundación Oceanogràfic, una institución que basa todas
sus acciones en criterios científicos y en el conocimiento acumulado por
décadas de investigación. Su labor incluye también la restauración de hábitats
y la evaluación de los factores que afectan a la biodiversidad marina del
Mediterráneo.
Con cada
nueva puesta detectada, se refuerza el compromiso con la conservación del
litoral valenciano y se dibuja un escenario esperanzador para la supervivencia
de estas especies amenazadas. La eclosión registrada en Almassora no solo
simboliza el éxito de un protocolo bien ejecutado, sino también el valor de una
ciudadanía atenta y de unas instituciones comprometidas con el medio ambiente.
Comentarios
Publicar un comentario